Si hay un político al que admiro y que tiene más claro que nadie lo que es el conocimiento libre y la libertad tecnológica es Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y cada vez que realiza declaraciones en este sentido son contundentes y clarificadoras, lástima que la gran mayoría de nuestros políticos no lo tengan tan claro.
En uno de sus últimos artículos en El País, de hace dos días, vuelve a clavarlo, y como muestra un botón: «Cabe recordar que de las cotas de independencia que aún no ha alcanzado Europa, junto a la energética, la tecnológica es una cuestión pendiente. No debemos permitir que, ante una evolución de Internet no acorde con los valores tradicionalmente defendidos por los estados europeos, nos encontremos sin capacidad de reaccionar. No debemos caer por la aplicación del difuso concepto de neutralidad tecnológica en una falta de respuesta en favor de la independencia tecnológica, como ya nos sucedió con el software libre.»